8 de mayo de 2018

Tarta Victoria



Seguimos en temporada de fresas y no podía dejar pasar la ocasión de presentaros la famosa tarta Victoria.

Esta tarta es conocidísima en el mundo entero, aunque más aún en Londres, debido a su origen real.   Era la preferida de la Reina Victoria de Inglaterra, ya que se servía en Palacio todos los días a la hora del té, de ahí que adquiriera tanta fama y se sirviera en todos los salones glamurosos y aristocraticos de toda Europa y el resto de las Colonias Inglesas.


Se compone de dos capas de bizcocho de vainilla con relleno de mermelada de fresa o frambuesa y una generosa capa de nata montada azucarada. ¡Si ya sabía ella que era perfecta para tomar el té!





Desde hoy, ya podéis probar esta tarta y merendar como unas reinas/reyes.

Tarta Victoria
de Las recetas dulces de Ana:

Para las dos capas de bizcocho en un molde de 15cm:
-200 gr de mantequilla sin sal
-200 gr de azúcar blanco
-4 huevos L
-200 gr de harina de trigo
-1 cucharadita de levadura en polvo
-100 ml de almibar (10 cucharadas de agua con 150 gr de azúcar blanco y una pizca de extracto de vainilla o azúcar vainillado)

Para el montaje de la tarta:
-500ml de nata montada azucarada
-mermelada de fresa (si es casera, mejor)
-fresas naturales para decorar


Empezamos preparando el almíbar:

Ponemos todos los ingredientes en un cazo y, removiendo al principio, lo ponemos a hervir durante unos 5-6 minutos. Lo retiramos del fuego y reservamos.

Preparamos ahora el bizcocho:

Precalentamos el horno a 180º.
Batimos la mantequilla a temperatura ambiente con el azúcar y la vainilla (podéis usar azúcar vainillado o unas gotas de extracto de vainilla), hasta que esté completamente integrado.
Añadimos los huevos uno a uno hasta que se integren en la masa anterior.
Ahora toca añadir la harina, previamente mezclada con la levadura, y batiremos un par de minutos más hasta que no quede ningún grumo.
Ponemos esta mezcla en un molde de 15 cm, si tenemos un molde alto lo podemos poner todo a la vez, sino, tendremos que dividir la masa en dos moldes diferentes, yo recomiendo esto último.
Horneamos unos 45 minutos a 180º (como siempre, pincharemos con un palillo, si éste sale seco, el bizcocho estará perfecto).

Una vez  tenemos los bizcochos, dejamos enfriar y montamos nuestra tarta.




En el plato donde vayamos a servirla, ponemos una primera capa de bizcocho y lo empapamos bien con el almíbar.
A continuación pondremos una capa de mermelada de fresa y encima de ésta una generosa capa de nata montada azucarada.
Ponemos encima la segunda capa de bizcocho y empapamos con más almíbar.

Ahora solo queda decorarla a nuestro gusto, suele presentarse con azúcar glas espolvoreado por encima y unas fresas naturales a modo de decoración.




Merienda de reyes, no dejéis de probarla.

Besos!




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